EL
ANTES Y EL DESPUÉS DE LA CRISIS ALEMANA
Yo era un niño de 12
años que vivía en Alemania, mi familia era humilde y no teníamos mucho dinero,
mi padre era panadero y mi madre trabajaba en un restaurante. Un día en la
tienda donde nos gustaba comprar golosinas después del colegio vimos que el
precio de las golosinas se había doblado. Le preguntamos el porque y nos dijo
algo sobre una inflación, cosa que no entendí muy bien. Cuando llegué a casa vi
a mis padres muy preocupados y me dijeron a mi y a mi hermana pequeña que
querían hablar con nosotros. Ahí nos contaron sobre la guerra que hubo y la
humillación que sufrió Alemania en esta y que tras un tratado que se firmó en
Versalles se dictaminó que Alemania debía pagar un montón de dinero a los
países a los que habían producido daños. Me dijeron que los precios estaban
subiendo y que al final estarían los precios muy altos.
DOS SEMANAS DESPUÉS:
Han pasado dos semanas
y esto es un infierno ya no puedo comprar nada porque lo que antes valía 5
marcos ahora vale más de un millón, lo único que podía hacer con el dinero era
usarlo como juguete y no era uno muy divertido, antes mis amigos y yo
quedábamos para jugar con los juguetes, ahora quedamos para lanzarnos dinero,
ya no tiene ningún valor. Me dijo mi padre que los billetes de 5, 10, 20 marcos
ahora son de 1, 2 ,3 millones de marcos y que le daban el dinero por la mañana
para que se lo pueda gastar lo antes posible antes de que vuelvan a subir los
precios. Ya empezaba a entender lo que me dijo el dependiente de la tienda de
golosinas, eso de la hiperinflación.
OCTUBRE DE 1923:
Ya soy más mayor y
entiendo mucho más. He leído en el periódico: los obreros de Hamburgo erigieron
barricadas. Querían ser los primeros de la nueva revolución alemana, una señal
para que el resto de los obreros alemanes les siguieran. Sin embargo, lo que
siguió no fue la revolución, sino la prohibición de los gobiernos socialistas y
comunistas en Turinga y Sajonia por el Gobierno central, también socialista.
Los comunistas se defendieron y la lucha llegó a ser como una guerra civil.
Finalmente, el ejército
triunfó y los comunistas fueron barridos. El Partido Comunista fue ilegalizado
durante un tiempo y, sobre todo, perdió muchos de los apoyos obreros con los
que contaba hasta el momento. Fue un punto de inflexión. Desde ese momento,
llamado por los comunistas la “derrota de octubre”, ya no intentarían una
revolución armada en Alemania. Su lucha se centraría, sobre todo, en el
Parlamento.
MÁS TARDE:
Hoy es la primera vez
que oigo de este hombre, pero promete mucho se llama Adolf Hitler y dice que el
podrá cambiar Alemania no sé cómo lo hará, pero creo que es la mejor alternativa
que tenemos a día de hoy, yo sé que le daré mi apoyo. Si eso hace que Alemania
vuelva a ser una gran nación.
Relato escrito
por: Javier Díaz Bonacasa
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