Mateo Camiña (De un día para otro)



DE UN DÍA PARA OTRO

Me llamo Jaime, tengo 15 años y actualmente vivo en la Comunidad de Madrid con mis padres (Miguel y Sara) y mis dos hermanas  (Blanca y Carmen).

Cuando fui pequeño tuve una infancia muy buena, hice muchos amigos con los que hoy en día sigo teniendo contacto y disfrutando del día a día con ellos. El día a día de nuestra familia es muy normal, a las 7:17, todas las mañanas llegaba nuestra madre y nos despertaba con una amplia sonrisa la cual nos contagiaba a toda la casa. Cuando ya estábamos en pie corríamos a saludarnos entre nosotros y también le decíamos los buenos días a nuestro padre nada más eso cada uno nos poníamos en órbita  de tal marera que nos vestíamos rápido para llegar pronto a la hora pero antes nos tomábamos el desayuno que nos preparaba papa con mucho amor para que nos diese energía durante todo el día.

A continuación nos metíamos en el coche con todo el material ya listo y preparado de la noche anterior y en el trayecto al colegio charlábamos con mamá como todas las mañanas. Cuando llegábamos al colegio mamá nos daba un beso y también nuestro bocata de fuet para el recreo y empezábamos las clases hasta las tres que acababa el colegio.

Papa y mama se iban a trabajar a sus respectivos trabajos y luego papa nos recogía del colegio. La tarde era muy simple, básicamente hacíamos los deberes y tiempo libre hasta la cena dónde solíamos jugar en el parque con nuestros respectivos amigos y a las nueve en punto empezábamos a cenar la comida que nos preparaba nuestra nana a la cual adorábamos con todo cariño.
Mientras cenábamos escuchábamos la televisión de fondo y más concretamente el canal de las noticias que a mi padre tanto le gustaba escuchar esas noticias que no hacíamos ni caso como que el presidente del gobierno ha hecho tal o cual, o que había aumentado el paro o directamente el tiempo. Para finalizar el día veíamos un poco más la tele y  nos íbamos a dormir.

Los fines de semana era más de lo mismo aunque hacíamos bastante más deporte.Una cosa que nos encantaba era viajar; tanto es así que hemos recorrido medio mundo como Japón, EEUU, China, Australia y muchos destinos más.

Pero todo esto cambió de un día para otro cuando en agosto de 2007 a mi padre le dejaron sin trabajo debido a problemas financieros que surgían en la empresa.

Este momento fue crucial y se hicieron muchas remodelaciones por en la vida hay que aprovechar todo aquello que tenemos por qué en el día menos pensado lo echaremos de menos y no lo volveremos a tener.

Comentarios