Gonzalo Díaz (De mayor quiero ser misionero)




DE MAYOR QUIERO SER MISIONERO


-          ¿Qué quieres ser de mayor Ragit?
-          ¡Misionero mamá! - Respondía él siempre
-          Pero somos pobres, africanos y nadie confía en nosotros para salvarles…
-          ¡Yo de mayor quiero ser misionero! – Insistía él
-          Pero hijo, nosotros somos los que recibimos la ayuda de los misioneros, no estamos en posición de dejar lo poco que tenemos para ayudar.
-          ¡Yo de mayor quiero ser misionero!
-          Bueno vale, pero cuando seas mayor, tú ahora céntrate en disfrutar de tu infancia lo que nuestra situación nos lo permita, yo te diré cuando te puedes dedicar a lo que quieras.
-          Vale mamá, esperaré a que tu me digas que ya soy mayor.

Ragit era conocido en todo el pueblo por su solidaridad, cariño con todos, ancianos, enfermos…

La madre de Ragit llevaba unos años muy enferma, y finalmente murió cuando Ragit tenía 6 años.

Ragit creció y siguió con su solidaridad, cariño y afecto habitual y agradecido por todos sus vecinos. Ya tenía Ragit 19 años y le preguntaron, ¿que quieres ser cuando empieces a trabajar?
¡Quiero ser misionero! Pero estoy esperando a hacerme mayor – Insistía él.

Ragit, que a demás de por su gran solidaridad también destacaba por su gran fe cristiana, seguía confiando en que en algún momento su madre le indicaría que ya se había hecho mayor y poder entonces dedicarse a lo que le gustaba, ser misionero.

Ragit se fue haciendo más y más mayor, y esa señal seguía sin llegar.
Llegó finalmente la hora de que Ragit se fuera con su mamá, y aunque el en su interior no creía haberse dedicado a lo que de verdad le habría gustado, sin saberlo había cumplido su sueño, ser misionero.

Había devuelto la vid a su aldea, ahora ya no existía el pesimismo, ni la sensación de inferioridad por su procedencia.

Todos recordarán a Ragit como el gran misionero de la aldea.


      Por: Gonzalo Díaz; 4ºD E.S.O.  a  22/2/17

Comentarios