Rafael Martín (Nuestras vidas)




NUESTRAS VIDAS

Allí estaba yo paseando por aquel bonito parque una tarde de invierno, hacia frio, pero me daba igual, no era la primera vez que paseaba con esta temperatura en la calle.

Pasear por el parque me hacia recordar diferentes aspectos de mi vida que me traían muy buenos recuerdos, cuando veía a los niños pensaba en aquellas aventuras cuando éramos pequeños como disfrutábamos jugando en los columpios, aunque alguna manera no entiendo porque deseábamos crecer.

Me acordaba de los abuelos y de esas comidas familiares tan desternillantes que acababan en broncas, pero al final los abuelos siempre estaban ahí para calamar el ambiente, y aun así nosotros queríamos crecer.

Seguí paseando y vi a una joven pareja con sus hijos y me acorde de papa y de mama, oh papa y mama no hay palabras que describan el agradecimiento que os tenemos por todo lo que habéis hecho por nosotros por como siempre habéis estado ahí sin aparente motivo. Y aun así queríamos crecer.

Continúe por la senda y me encontré a dos adolescentes enamorados sentados en un banco y me acordé de ella, si ella la persona mas especial de mi vida y como no recordar aquel primer beso tímido o aquel atardecer en las azoteas de Madrid, aquellas noches de locura en los garitos o el día en el que te dije que te quería porque tu eras lo mas bonito que me ha pasado en mi vida. Pero aun así queríamos crecer.

En este momento pensé porque queríamos crecer cuando en verdad lo teníamos todo. ¿cuál era el objetivo de crecer, el dinero, el éxito…? No lo sé ni yo, pero solo puedo decir una cosa: niños, jóvenes no queráis crecer se felices con lo que tengáis, aunque no sea mucho porque os aseguro que lo más valioso que tenéis es el tiempo, disfrutar, hacer locuras y no olvidéis nunca que solo tenemos una vida para dar un beso un abrazo o decir te quiero.

Rafael Martin Ruiz 2/04/2019



Comentarios