Jaime Sánchez (El paso del ahora)




EL PASO DEL AHORA

Por fin llega el tan esperado y ansiado día, el viernes, que aunque haya clase, sabes que ese día podrás acostarte tarde y levantarte el sábado aún más tarde a menos que tengas alguna actividad, tener que estudiar o trabajar.

Los viernes estamos más felices más contentos con ganas de divertirte porque es cuando nos sentimos libres y sin preocupaciones que nos coman la cabeza, pero de repente llega el sábado por la mañana, demasiado rápido, aunque todavía estas contento porque sabes que el próximo día es domingo lo cual implica que no tendrás que ir al colegio ni tendrás que levantarte temprano.

 En un abrir y cerrar de ojos te das cuenta que nos las diez de la noche y te dices a ti mismo “pero si hace nada era viernes por la tarde” y pienso “supongo que el tiempo se me ha pasado muy rápido porque me lo he pasado genial”.

Después de una noche de risas y fiesta con tus amigos, como no, llega ese día, el día en el que empiezas a recordar todo lo que tienes que hacer para esa semana de colegio que no quieres que vuelva a empezar. Primero te acuerdas de los deberes que había de religión, pero como el lunes no hay clase de religión no los haces. Más tarde piensas si tienes algún examen y sí, tienes tres exámenes esa semana y te estresas ya que pensabas que el domingo no iba a llegar, pero ha llegado y debes empezar a estudiar.

Es lunes por la mañana, te levantas sin ánimos y con bastante sueño, a menos que seas de esas personas que se van a dormir a las 9 de la noche. Llegas a clase y tu mente piensa “otra semana más, ojalá fuera viernes otra vez”.

Pasan los días, lunes, martes, miércoles, jueves, pero pasan muy lentamente, hasta que vuelve a llegar ese gran día, el viernes y me pregunto a mí mismo, ¿por qué estoy tan alegre de que haya llegado el viernes? Y de repente me siento atrapado, atrapado en la maldita rutina, en la cual todas las semanas es el mismo objetivo, que llegue el fin de semana para poder salir y divertirme, ser libre, entre comillas, y no tener las ataduras que el colegio y tus padres te imponen entre semana.

Con esto quiero decir que hay que vivir el ahora y disfrutar del momento, como dice la famosa frase “carpe diem”, tanto como si es lunes como si es sábado ya que lo que importa es el presente porque ni el pasado ni el futuro existen, el pasado son solo recuerdos y el futuro expectativas.

Asique deja de preocuparte pensando que día de la semana es e intenta vivir el presente todos los días de tu vida haciendo lo posible por no crear esa imaginaria y absurda rutina en la que creemos estar.

Y, para terminar, y dando paso a un tema de otro posible relato, me gustaría que pensarais que es el tiempo para vosotros ya que cada uno tiene su forma de verlo y también pensad en si estáis metidos en esa rutina, y si lo estáis intentad cambiarlo ya que el presente solo se vive una vez y si creemos que todas las semanas es lo mismo, no estamos viviendo y aprovechando bien el paso del ahora.

Jaime Sánchez Fernández 1ºA de bachillerato 02/2020

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