Manuel López (El temporal)


 

EL TEMPORAL

 

Bueno esta historia se da no hace mucho este mismo 2021 en las famosas nevadas causadas por “filomena” es una historia bastante impactante de como en la vida puedes pasar de dos estados muy diferentes rápidamente.

 

La historia comienza en Madrid en una familia de 6 que se despierta un sábado viendo la calle y todo su barrio nevado, los niños se ponen la ropa de invierno botas y guantes y salen a la calle a jugar entre ellos.  Se dedican primero a una batalla campal de bolas de nieve utilizando los coches como trincheras y así pasan un buen rato por la mañana mas tarde deciden hacer un muñeco de nieve entre los 4 al que le dedican su tiempo para al terminar llamar a sus padres y que les hagan una foto con el muñeco de la que seguro presumirán en la próxima comida familiar con sus primos, tíos y abuelos.

 

Todo transcurre tranquilo y amigable hasta que el padre de los niños les dice que tienen que volver a subir a casa ya que esta empezando a nevar mucho y hace mucho viento. La familia ya en casa comienza a jugar a un juego de mesa todos juntos hasta que llaman al padre al teléfono.

 

Me han llamado del hospital tengo que ir a revisar unas operaciones les dice el padre a sus hijos. Pero papa le dicen ellos, como te vas a ir ahora si es viernes además esta nevando, la mujer le mira preocupada preguntándole como va a ir con las calles incomunicadas.

 

El le quita el hierro al asunto y dice que se las apañara para conducir ya que el coche es grande y aguantaran las ruedas. Se despide de los niños y de su mujer les promete que volverá a casa para cenar y para que puedan terminar la partida juntos

 

El padre sale con alguna que otra dificultad del garaje, pero consigue sacar el coche, durante su travesía hacia el hospital sufre algún volantazo, pero no grandes problemas al ir sin cadenas y con tanta nieve en el asfalto a pesar de ser un coche grande.

 

Llega al hospital y pasa la tarde siendo el vigilante y controlando las diferentes operaciones con éxito que se producen, mientras tanto el tiempo sigue empeorando y ya van mas de 15 horas sin parar de nevar y sigue haciendo mucho viento.

 

Termina la jornada los médicos se felicitan entre sí, aunque se dan cuenta que el tiempo sigue empeorando y que cada vez esta más difícil moverse sin correr riesgos. Se les plantea la posibilidad de quedarse a dormir en el hospital y ya a la mañana siguiente volver a sus respectivos domicilios, se les habilitan camas ya algunos por precaución deciden tomar esta vía.

 

Nuestro protagonista al tener tantas ganas de volver a casa decide como alguno de sus compañeros volver a su casa en su coche a pesar de que no se lo recomiendan.

 

Sale del hospital y ya van 18 horas sin parar de nevar, se han caído arboles por el vendaval y además las calles se encuentran sobrepasadas por la nieve. En las calles principales al haber mas coches se hace más fácil su tránsito, pero en las menos comunes las cantidades de nieve son muy altas, muchos coches patinan y los conductores pierden el control.

 

El padre de la familia lleva ya un rato conduciendo y le escribe a su mujer que ya esta volviendo a casa y que le guarden algo de cena. De repente una placa de hielo le provoca que el coche patine y el a la hora de querer recuperar el control da un volantazo y pierde definitivamente el control del vehículo y al no poder frenar el coche choca con una valla de metal, con la mala suerte de que al haber hielo ahí el coche se desliza y se da la vuelta completamente.

 

En este texto he decido contar esta historia como mi pequeño homenaje aquellas personas que perdieron la vida en la carretera por las condiciones de la última nevada, como relata esta por el simple hecho de querer volver a casa con sus familias.

 

Manuel López López, 5/02/2021, Segunda evaluación

 

 

 

 

 

Comentarios