UN SUEÑO
Este relato no es un relato
cualquiera, este relato que os voy a narrar ahora trata nada más y nada menos
que de un sueño, como bien dice el título, pero no cualquier sueño, es el sueño
que perfectamente podría ser el que todos los hombres hemos tenido alguna vez,
que nadie lo malpiense por favor. Es más que un sueño, es la ilusión que alguna
vez hemos tenido de niños y de no tan niños, es la fantasía de poder ser un
jugador de futbol profesional, y jugar con los mejores jugadores, quien no ha soñado
con la idea de jugar con el mejor jugador de todos los tiempos Lionel Andrés
Messi, o chutarle a Iker Casillas, y así con una infinidad de jugadores que han
sido nuestros ídolos de infancia. Pues hubo una vez que un chico lo soñó y lo
deseo tanto, que llego a hacerse real, o casi. Soy Javier Gutiérrez Sensat, y
después de esta breve introducción, es hora de empezar con el relato.
El muchacho del que vengo a hablar
hoy no es otro que Gabriel Batistuta, estoy seguro que después de decir su
nombre, ya muchos sabréis quién es, pero a pesar de que ahora es un futbolista
retirado, y mundialmente conocido, no siempre fue así. Gabriel nació en
Avellaneda, una provincia de Santa Fe en Argentina, el 1 de febrero de 1969. El
pibe se crio en una familia normal y corriente del país plateado, vivió en un
barrio humilde, y fue a la escuela pública. Desde pequeño mostro un gran
interés por los deportes, pero principalmente destacó en el fútbol, y solía
jugar en la posición de defensa, lo cual es extraño ya que en un futuro
acabaría jugando en una posición muy distinta. Gabriel no solo era una
enamorado de jugar al fútbol, sino también de verlo, y desde pequeñito se
enamoró de un club, el Newell’s Old Boys (club que a los verdaderos aficionados
al fútbol les sonara, ya que en ese equipo fue en el que Messi marco sus
primeros goles). Batistuta dio sus primeros pasos con el balón en el equipo de
su colegio, el cual estaba inscrito en una liga municipal. A pesar de que como
he nombrado antes que Batistuta jugaba de central, debido a que tenían que
jugar un partido contra otro colegio con el cual tenían una gran rivalidad y el
delantero del equipo no había podido asistir, Batistuta tuvo que hacer de
delantero, y le gusto tanto que nunca más volvió a jugar como defensa. A su entrenador
en un primer momento, no le gustó la idea de que muchacho de Avellaneda jugase
como delantero, ya que él era el mejor defensa del equipo, pero después de
jugar varios partidos como delantero, el míster se dio cuenta de que Gabriel
tenía un don o una facilidad mayor que los demás para anotar goles. Esta
habilidad de Gabriel le llevo a su equipo a ganar durante 4 años consecutivos
la liga municipal. Esto llamo la atención de grandes clubes, pero Gabriel a sus
14 años, tuvo claro a que equipo se quería ir, al equipo de sus sueños, el
Newell’s Old Boys, con los que firmó un contrato de 5 años. Durante esos 5 años
Gabriel fue ganando conocimientos y experiencias dentro del terreno de juego,
pero también fuera. Poco a poco fue ascendiendo de equipos del Newell’s, y
termino explotando en el equipo filial, es decir el segundo equipo, lo cual ya
era un gran logro, y más con su edad, él era el más pequeño. Todo esto provoco
que el primer equipo del Newell’s que militaba en la Primera División Argentina
le llamara para un partido y le hicieran debutar a sus 20 años.
Tras este gran logro, Batistuta dio
el salto a Europa, y se fue cedido a Italia, al Club Sportivo Italiano, en el
que, a pesar de no jugar muchos minutos, dejo grandes destellos de calidad, que
fue suficiente para que el segundo club más importante de Argentina se fijase
en él, el River Plate, club donde sí tuvo un papel muy protagonista, y
consiguió ganar su segundo título oficial en Argentina. Tras esa gran
temporada, el club más grande de argentina, y el máximo rival de River Plate,
Boca Juniors, se terminó haciendo con los servicios del avellanedense, el cual
disputo dos grandes temporadas en el equipo bostero, lo que le fue suficiente
para volver a Europa, esta vez con un contrato y a un club top, a la histórica
Fiorentina. El crack santafesino cuajo grandes temporadas en el club italiano,
llegando a ser el máximo goleador de la liga en una temporada, y haciéndose con
grandes títulos. Todos estos logros llamaron la atención de la directiva del Futbol
Club Barcelona, el cual se acabó decantando por otro delantero debido a las
preferencias del míster en aquel entonces. Tras su fichaje frustrado, termino
en las filas de la Roma, equipo en el que aumento en gran medida su palmarés, y
termino su contrato cedido en el Inter de Milán.
Finalmente se retiró en Catar, y así
se terminó el sueño de un niño cualquiera, que cumplió la ilusión de todos, el
chamuyo que empezó jugando en el equipo de su colegio, terminó conquistando
Europa con sus goles, y enamorando a Italia con su juego. El chico nacido en
Avellaneda, es ahora uno de los mayores ídolos argentinos, y uno de los máximos
referentes para los delanteros.
JAVIER GUTIÉRREZ SENSAT
1 BACHILLERATO A
02/2023
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