NADA SERÁ COMO ANTES
Hola
soy Amed y soy un niño Palestino que vive en el norte de Gaza, vivo con mi
familia en un pequeño apartamento con vistas hacia mi hermosa ciudad, aunque ya
no lo sea tanto, Hace ya tres semanas que el ejército israelí nos ataca y las
bombas ya son comunes en mi ciudad. cada vez que veo por la ventana veo
edificios destruidos y familias lamentándose porque ya no tienen donde vivir,
teniendo miedo de que mi edificio sea el siguiente. Esto ya se lo he comentado
a mi madre, pero siempre me dice que no me preocupe que todo volverá a la normalidad,
aunque yo sé que me está mintiendo se la nota en la cara yo sé muy bien que
nada será como antes.
Es
martes y me desperté con el ruido de una bomba algo que ya ni me extraña, voy
para la cocina y allí estaba mi madre ya levantada no creo ni que haya dormido,
la pregunte si papa había llegado a casa, pero me dijo que no. Estas últimas
semanas no le he visto casi ya que es cirujano y desde que empezó la guerra es
como si viviera en el hospital. También la pregunte si podía desayunar algo,
hace tres días que no cómo y estoy muerto de hambre, pero me dijo que no que la
comida que nos quedaba era para emergencias. Es una pesada siempre esta con lo
mismo, harto de ella me diriji corriendo hacia la puerta para irme a dar un
paseo llevaba ya tres semanas sin salir, al cerrar la puerta escuché a mi madre
gritándome que no saliera de casa, pero yo sin hacerla caso me fui.
Sali de mi edificio y empecé a caminar por las
calles en las que solía jugar antes de la guerra vi que todo estaba destruido y
solo quedaba mero polvo. También me encontré a miles de familias viviendo en
las calles después de que sus casas fueran destruidas por el ejército israelí,
mientras iba caminando pensé en como mi vida había cambiado tanto en tan solo
unas semanas: ya no iba al colegio quien diría que echaría de menos ir al colegio,
ya no veía a mis amigos ni siquiera sé si seguirán vivos, ya no sé nada de mis
abuelos como viven en otra ciudad no puedo comunicarme con ellos ya que no hay internet.
Mientras pensaba en todo esto la alarma de bombardeo empezó a sonar y
rápidamente corri hacia mi casa sin saber si estaría destruida o no, llegue y subí
corriendo las escaleras abrí la puerta de mi casa y vi a mi madre llorando,
mirando a la ventana porque tenía miedo de no volverme ver. Fui corriendo a
ella llorando para darla un abrazo y de repente todo se volvió gris no se bien
lo que paso solo escuche los gritos de mi madre que de repente se desvanecieron.
No entendía nada solo sentía un dolor increíble en mi pierna no podía más hasta
que perdí la conciencia.
Me
desperté enterrado en escombros sin saber bien que había pasado, pero lo podía
deducir este es el día que llevaba temiendo que llegara desde que empezó la guerra.
Empecé a escuchar murmullos a mi alrededor y gente que gritaba ayuda mientras
lloraba yo solo podía pensar en cuento me dolían las piernas. de repente vi un rayo
de luz entre las piedras y grite ayuda con las únicas fuerzas que me quedaban esperando
que alguien me oyera y me salvara. De repente escuche como alguien iba quitando
los escombros que había encima mío y cuando quito el ultimo me di cuenta de que
era mi padre, supongo que al enterarse que había caído una bomba en nuestro
edificio vino corriendo hasta aquí. Se le veía aliviado por haberme encontrado,
pero a la vez muy preocupado no me dijo nada y me cogió en hombros y empezó a
correr dirección al hospital, no sabía lo que estaba pasando lo único que sabia
es que estaba cansado y me dolía mucho la pierna.
Llegamos al hospital super rápido y mi padre
no paraba de gritar. ¡quirófano! ¡Quirófano!. Mientras íbamos corriendo por el
hospital para encontrar un quirófano me iba encontrando peor ya casi no tenía
conciencia. Mi padre por fin pudo encontrar un quirófano que estaba libre y
rápidamente me tumbo en la camilla y empezó a buscar todo lo que necesitaría, seguía
sin entender nada hasta que vi mi pierna derecha estaba toda morada ya entendía
porque me dolía tanto. con las únicas fuerzas que me quedaban levante un poco
mi torso y le pregunte a mi padre que me iba a hacer, el vino llorando y preocupado
me dijo que si no me amputaba la pierna ahora mismo podría morir, pero me dijo
que el hospital se había quedado sin recursos y no les quedaba anestesia y que
me iba a operar sin usar anestesia, pero me dijo que no me preocupara que todo
saldría bien. Al decirme esto me petrifique no sabía cómo reaccionar lo único
que sabia es que tenía miedo y no paso ni un segundo y me puse a llorar. Mi
padre y yo nos abrazamos y mientras el me consolaba yo solo lloraba y lloraba
teniendo miedo de que este fuera el ultimo abrazo que le diera.
Mi padre se alejó de mí y fue a buscar un
trapo me lo dio y me dijo que iba a empezar la operación y que mordiera el
trapo mientras me operaba, yo me tumbe y me intente tranquilizar, pero no podía.
Mi padre me dijo que si estaba listo y yo asustado le dije que si empecé a
morder el trapo y de repente sentí el mayor dolor que he sentido en mi vida, el
dolor me subió hasta la cabeza escupí el trapo y empecé a gritar a mi padre que
parara, de repente no sentía nada el dolor se había esfumado yo pensaba que la
operación ya había acabado y con una sonrisa miré a mi padre, pero él estaba
llorando no entendía nada, porque estaba llorando si yo ya estaba bien.
Empecé a ver la luz del quirófano y poco a
poco sentía como me acercaba a ella era una sensación de libertad me sentía
super bien y cuando me di cuenta estaba levitando, mire para abajo y ahí estaba
yo durmiendo y mi padre llorando, abrazándome. No entendía nada, pero cada vez
estaba más arriba. Sali del hospital y empecé a ver toda mi ciudad desde las
alturas todo estaba destruido las alarmas sonaban veía a familias llorando y
bombas cayendo, pero a mí ya me daba igual ya que yo era libre. Mientras que subía
alguien me agarro de la mano era mi madre me miro sonreímos y nos abrazamos ya
que para nosotros todo había acabado.
Esta
es mi historia , la historia de un niño palestino que a sido víctima de esta terrible guerra , esta guerra que se ha
llevado por delante a más de 26 000 personas en menos de tres semanas , esta guerra injusta
contra mi pueblo , esta guerra que los medios de comunicación han convertido en
una batalla de ideologías en vez de preocuparse por las vidas humanas , esta
guerra que como muchas se ignoran a la semana, esta guerra que como todas se
lleva la vida de miles de civiles , esta guerra que se usa para debates
políticos pero luego no se hace nada al respecto y esta guerra que como todas
debería ser terminada.
Miguel Sevilla Rodriguez 1B 6 de febrero 2024
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